Hollywood es un lugar donde el glamour es el plato principal y la talla cero es la guarnición. Pero no todos los famosos se ajustan a este menú restringido. Algunos de ellos han demostrado que tener unos kilitos de más no solo es fabuloso, sino que también puede ser la clave para el éxito. Vamos a conocer a ocho estrellas que han abrazado su cuerpo tal y como es, mientras el mundo los adora.
1. Jack Black: El rockstar del sobrepeso
Jack Black es el tipo de actor que no necesita abdominales marcados para robarse el show. En Escuela de Rock nos enseñó que la actitud es todo, y en la vida real ha demostrado lo mismo. Jack ha dejado claro que ser regordete no es una limitación cuando tienes suficiente carisma para llenar estadios. Además, ¿quién necesita un gimnasio cuando puedes tocar el solo de guitarra más épico con solo tu energía? ¡Jack Black es la prueba viviente de que la grasa no pesa, solo rockea!
2. Dwayne "The Rock" Johnson: De fornido a rocoso
Espera, espera… ¿The Rock en una lista de sobrepeso? Pues sí. Antes de que Dwayne Johnson se convirtiera en el hombre más musculoso de la Tierra (o del universo, probablemente), el ex luchador no siempre estuvo en su pico físico actual. ¿Recuerdas esos días en la WWE? El tipo ya era masivo, pero tenía más en común con un camión lleno de músculos y un poco de "peso extra" que con el tanque que es hoy. Ahora es tan grande que hasta su cuello tiene abdominales, pero su transformación es digna de mención.
3. Chris Hemsworth: El Thor relleno que queríamos ver
No todos los superhéroes necesitan estar en forma todo el tiempo, y Chris Hemsworth nos lo recordó en Avengers: Endgame con su legendario “Fat Thor”. Este Thor con sobrepeso no solo nos hizo reír a carcajadas, sino que también nos mostró que incluso los dioses pueden caer en la tentación de una buena pizza y cerveza. ¿Y adivina qué? El universo no se derrumbó porque Thor subiera unos kilitos. Así que si un dios nórdico puede tomarse un descanso de los abdominales, ¡tú también!
4. Jennifer Lawrence: La reina del 'Me importa un pepino'
Jennifer Lawrence siempre ha sido la chica a la que no le importa lo que piensen de su figura. Aunque no tiene un problema serio de sobrepeso, ha sido víctima de la absurda presión de Hollywood sobre estar siempre en forma. JLaw ha sido la voz de la razón, riéndose de las expectativas irreales que la industria impone a las mujeres. ¿Comer pizza y hamburguesas antes de la alfombra roja? ¡Eso sí es estilo de vida! Si hay algo que Jennifer ha demostrado es que la comida es tu amiga, y la única dieta aceptable es la que te hace feliz.
5. Seth Rogen: El gordito divertido que se hizo millonario
Seth Rogen es el ejemplo perfecto de cómo ser el chico regordete y simpático en la escuela puede convertirse en una carrera millonaria. Con películas como Superbad y This is the End, Seth se ha labrado una carrera siendo el tipo gracioso con el que todos queremos tomarnos una cerveza… y luego comer nachos. Si bien ha perdido peso con los años, sigue siendo ese mismo tipo relajado que no se toma nada demasiado en serio, excepto las papas fritas.
6. Vin Diesel: El peso pesado del amor por los autos y las hamburguesas
Vin Diesel puede ser Fast and Furious, pero también sabe tomarse su tiempo para disfrutar de una buena comida. Aunque normalmente lo vemos en plena forma, ha sido captado en más de una ocasión con lo que algunos llaman "la panza Vin". Y la verdad, lo entendemos: ¿quién puede decirle que no a unas cuantas hamburguesas después de tantas carreras ilegales y explosiones? A fin de cuentas, el tipo sigue siendo más rápido que cualquiera de nosotros, incluso con unos kilos extra.
7. Russell Crowe: El gladiador que también disfruta del banquete
Russell Crowe ha pasado por varias transformaciones físicas a lo largo de los años, desde ser el imponente Gladiador hasta dejar que la edad y las buenas comidas le pasen factura. Pero, siendo honestos, ¿quién puede culpar a un hombre que ha vencido a tigres en la arena de Roma por disfrutar de unos cuantos banquetes? Crowe sigue siendo una leyenda del cine, con o sin six-pack, demostrando que el talento no tiene peso límite.
8. Adele: La voz que lo hizo todo más grande
Adele no solo es famosa por su impresionante voz, sino también por haber sido durante mucho tiempo la diva que desafió las expectativas de la industria. Durante años, algunos se enfocaron más en su peso que en su talento, pero ella no dejó que eso la detuviera. Con su éxito en el mundo de la música, vendió millones de discos y demostró que puedes dominar la escena musical sin seguir los estándares de belleza convencionales. En años recientes, Adele decidió hacer un cambio en su vida y perdió peso, pero la esencia de su éxito sigue siendo la misma: su música y su personalidad. Al fin y al cabo, ¡lo que más importa es la grandeza de su voz, no el tamaño de su cintura!
Conclusión: ¡El sobrepeso es solo otra forma de brillar!
Estas ocho estrellas han demostrado que no necesitas encajar en el molde de Hollywood para ser una superestrella. Ya sea que estén en su peso ideal o que prefieran un poco más de "cariño extra", lo importante es su confianza, su talento y, sobre todo, su habilidad para reírse de sí mismos. Así que la próxima vez que te preocupes por esos kilitos de más, recuerda: si Jack Black puede ser una estrella de rock y Thor puede salvar el universo con una barriga cervecera, tú puedes hacer lo que quieras. ¡El mundo es tu pasarela!
