El Amanecer

"Me mueve el agradecimiento que siento por haber logrado un cambio radical en mi manera de vivir y ver la vida."

Estimado lector: en las próximas páginas compartiré con ustedes mi viaje hacia la reconexión con la vida misma. Me mueve el agradecimiento que siento por haber logrado un cambio radical en mi manera de vivir y ver la vida. Existen muchísimos materiales hoy día disponibles en nuestro idioma acerca de motivación, enprendedurismo y negocios. Por el contrario, la mayoría de los contenidos disponibles acerca de mindfulness (atención plena) están primordialmente en inglés. Adicionalmente, la cosmovisión de muchos de estos contenidos está impregnada de las culturas donde se expresan, en su gran mayoría orientales. Por eso quiero compartir con todos, en nuestro idioma y desde nuestra experiencia latina de la vida, lo que ha sido mi experiencia.
El texto buscará un balance entre compartir ideas y sugerir puntos que puedas poner en práctica de manera inmediata.
La premisa básica de la cual partimos es que la geometría y el diseño del universo en el que vivimos son perfectos. La prueba más fidedigna es que las galaxias, que son muchísimas, no andan chocando entre ellas. Nuestra primera intuición debería ser observar con muchísima atención como funcionan las cosas naturalmente.

Así que empecemos por el inicio del día: el amanecer.
Toda la vida de nuestro planeta está organizada alrededor del ciclo del tiempo. Los animales, plantas y demás especies diurnas comienzan su actividad cuando empieza a salir el sol.
Actividad 1: despiértate mañana al menos 1 hora antes de que amanezca en tu ciudad (puedes revisarlo en tu celular normalmente). Pon el despertador y sal a caminar durante 1 hora. Repite entre 5 y 7 días de la semana. Para un mayor efecto de bienestar, trota. Al ritmo que tú puedas y te sientas cómodo. No es una competencia. Hazlo durante 2 semanas y cuéntame cómo te sientes.
Según la medicina ayurveda, los tipos básicos de energía no solamente se expresan en nuestra composición corporal.
También se manifiestan en las horas del día, los meses del año y las épocas de nuestra vida. Es así entonces que las primeras horas del día están llenas de energía "vata". La energía "vata" es la energía del éter y del aire. Esta energía inspirará la flexibilidad, creatividad y fantasía en nuestras vidas.
Para los orientales, ejercicios como el "hatha yoga" y la meditación son la recomendación principal. Creo fielmente que son excelente herramientas que en el contexto de sus culturas dan excelentes resultados. En nuestro mundo occidental, tan dominado por el intelecto, he descubierto que la mejor manera en que puedo calmar mi mente es justamente mediante un ejercicio activo al despertar.
El objetivo no es solamente el ejercicio. Por eso es que la recomendación no es despertar e ir a la caminadora en el gimnasio. Ocurre algo increíble cuando amanece. La vida despierta. Se siente en los pájaros que cantan, en los animales que despiertan.
Se ve como el día se empieza a iluminar. Los animales que hasta ese momento han estado tranquilos empiezan a moverse.

No he visto el primer animal silvestre que duerma hasta las 12 del día. Sé que al principio te costará despertarte. Pero como te digo en tan solo dos semanas te sentirás tan bien que simplemente te despertarás feliz a conquistar un nuevo día. Porque de eso se trata, de que poco a poco vayas ejerciendo tu poder de voluntad.
Dado que el cuerpo físico y el cuerpo mental están totalmente interconectados, si actuamos sobre nuestro cuerpo físico entonces veremos que nuestro cuerpo mental se calma. Ese es el objetivo más grande que necesitamos alcanzar. Absolutamente todas las especies del planeta, menos la nuestra, vive en armonía con la creación. Solamente los seres humanos, por la actividad de nuestro cerebro, queremos ser más inteligentes que el conjunto del universo mismo. Esto está trayendo un desbalance sobre la vida del planeta completo. Más adelante hablaremos de este tema.

La felicidad se construye. Es un camino, empieza mañana mismo el tuyo.

Leonardo Ramirez,
Medellín, Septiembre 2019